En el mundo empresarial se ha incrementado el uso de las evaluaciones comparativas (benchmarking) desde hace tiempo y su importancia sigue en aumento. Se trata de un proceso en el que se miden y comparan productos, servicios y prácticas frente al competidor más fuerte, que se considera como la organización líder en rendimiento en el área correspondiente. En los negocios, la búsqueda continua de fortalezas y debilidades, así como la explotación del potencial oculto, son factores clave del éxito que permiten alcanzar la calidad y una competitividad sostenible.

Las evaluaciones comparativas ayudan a buscar, de un modo constante y específico, nuevas ideas, métodos eficaces, procedimientos y procesos externos a la institución; también contribuyen a impulsar la innovación y la mejora interna. De este modo, las evaluaciones comparativas se centran en el desarrollo de la organización.

Cuadro 27. Preguntas para reflexionar y opciones de acción futura